El Comisionado Residente en Washington, Pedro Pierluisi, agradeció hoy los pasos afirmativos que tomaron tanto la Administración del Seguro Social como la publicación de los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS, en inglés), a quienes recientemente urgió a mejorar los materiales escritos y de orientación que reciben los envejecientes en la Isla, de manera que estén mejor informados sobre los períodos de inscripción y de las consecuencias de que lo hagan tardíamente.
Sin embargo, insistió en la injusticia que representa para los puertorriqueños beneficiarios del Medicare el que su acceso a la parte B no sea automático como en el resto de los estados, y aseguró que continúa realizando esfuerzos con el senador Charles Schumer (D-NY) para que se atienda la medida que presentó para mejorar el acceso y la disparidad.
“Me satisface saber que han estado orientando mejor y más claramente. Pero tengo que reiterar mi insatisfacción ante el hecho de que Puerto Rico es la única jurisdicción de Estados Unidos donde los individuos que son elegibles para recibir los beneficios de la Parte A de Medicare tienen que hacer las gestiones para recibir los beneficios de la Parte B, cuando en los demás estados y territorios es automático”, dijo Pierluisi.
“Esta disparidad afecta a cerca de 53,000 beneficiarios de la Parte B, que han pedido entrar después del término reglamentario de siete meses, pagando una penalidad de por vida. Estos beneficiarios, la mayoría de los cuales son de recursos limitados, están pagando sobre $7 millones al año en penalidades al gobierno federal. Además, hay sobre 100,000 elegibles que no se han inscrito en la Parte B”, agregó el Comisionado Residente.
El Comisionado Residente aseguró en que insistirá en el proyecto que presentó para que Puerto Rico deje de ser la única jurisdicción en la que se tiene que solicitar el ingreso a la Parte B. Su medida reduciría las penalidades por la inscripción fuera de término que estos 53,000 individuos están obligados a pagar y además, establecería un período especial de inscripción durante el cual los más de 100,000 individuos que no tienen Parte B podrían suscribirse sin estar sujetos a penalidades sustanciales.
“En esta batalla cuento con un gran aliado, el senador Schumer, que comprende que lo correcto es arreglar esta situación que tanto afecta a nuestros seniors. Seguiremos trabajando conjuntamente para lograr eliminar esta injusticia. Todos pueden contar con que no habrá gestión que deje de hacer por el bien de los nuestros”, indicó Pierluisi.
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