La Asamblea Nacional de Ecuador votó a favor de retirarse del Tratado de Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) también conocido como el Tratado de Río que firmaron con Estados Unidos en la época de la Guerra Fría (1947).
El presidente Rafael Correa anunció su propósito durante la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA), en Bolivia, por considerar que el tratado había perdido vigencia y que nunca cumplió con su objetivo de proteger a los países miembros sino más bien ha servido para amparar “las acciones imperialistas de Estados Unidos”.
Una comisión legislativa de relaciones internacionales recomendó renunciar al TIAR por considerarlo “anacrónico”. El tratado era para protegerse mutuamente entre los países miembros en caso de una agresión extranjera, pero según Rafael Correa este acuerdo se rompió cuando Estados Unidos se negó a intervenir en el conflicto entre Argentina y Gran Bretaña durante la guerra de las Malvinas.
Pero la salida de Ecuador del TIAR no es de inmediato, ahora la medida pasará para la firma del presidente y después será enviado a la OEA. Dos años después de recibido el documento el país andino dejará oficialmente de ser miembro del TIAR.
Según un comunicado oficial de la Asamblea Legislativa dominada por el partido oficialista de izquierda de Rafael Correa el tratado “es el más vergonzoso instrumento de penetración imperialista” y en el marco del tratado se ha producido “una cadena de inhumanos atentados a la vida del continente”.
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