Un estudio realizado en España revela que la Navidad, en vez de alegría y regocijo, provoca estrés en el 64% de los españoles. La razón de que esta gran porción de la población se sienta estresado es por los numerosos gastos a los que tienen que hacer frente durante las festividades navideñas.
Además de que el 64% de los españoles se siente estresado y ansioso en la Navidad, el 73% de la población del país está preocupado por la situación económica por la que atraviesa España, deja evidenciado ese estudio de Nascia.
En cuanto a los síntomas concretos que genera el estrés en Navidad destaca el insomnio, en un 65 % de las personas estresadas, dolores de cabeza entre otro 45 %, dolores musculares en el 76 % y dolor de estómago en otro 53%.
Sería interesante saber cuánto estrés se sufre en Puerto Rico durante la Navidad, como resultado de la comercialización excesiva de las festividades navideñas. En un país que atraviesa una seria crisis económica, la Navidad debe constituir un período sumamente estresante para muchos. Es motivo de entristecimiento para otros su soledad y/o desarraigo familiar en medio de las festividades navideñas, cuando la tradición es compartir en familia y entre amistades cercanas.
Tergiversado el verdadero contenido espiritual de lo que debiera ser la conmemoración del natalicio de quien se considera la figura central del cristianismo, la Navidad ha dejado de ser una festividad religiosa. Se ha convertido en una orgía consumista centrada en el personaje de Santa Claus, una figura mitológica que ha sustituido al símbolo religioso, cuyo natalicio da sentido a la Natividad: la celebración de un nacimiento. El nacimiento de quien se considera en el cristianismo el verbo hecho carne: el Hijo de Dios.
Constituye esta tergiversación y comercialización de la Navidad la principal razón del estresamiento que las festividades navideñas causa entre muchos, en vez de provocar alegría y contentamiento.
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