Buscan se investigue liquidez del BGF

El portavoz del Partido Nuevo Progresista (PNP) en el Senado, Larry Seilhamer radicó la Resolución del Senado 910 para que ese Cuerpo investigue las consecuencias de que el Banco Gubernamental de Fomento para Puerto Rico (BGF) no disponga de la liquidez estimada a finales del año fiscal que culmina el 30 de junio de 2015, según consta en un informe emitido por Global Credit Research de Moody’s Investors Service.

El portavoz del Partido Nuevo Progresista (PNP) en el Senado, Larry Seilhamer destacó que no tener un plan preventivo ante estos señalamientos de insolvencia pudiera provocar una nueva degradación de las deudas de la Isla.

“Según detalla este informe para el año fiscal actual, específicamente en marzo de 2015, el BGF podrá quedar en un estado de insolvencia. Es altamente preocupante la situación que puede encarar el BGF por lo que corresponde de manera urgente una acción legislativa a los fines de que se indague sobre cuáles son los planes de acción de esta agencia para atender la posible falta de liquidez. No podemos esperar a que llegue el momento para actuar, desde ya el gobierno tiene que presentar soluciones. Esta situación exige que los directivos del BGF demuestren cómo atenderán una crisis económica de esta magnitud”, indicó Seilhamer.

El portavoz del PNP destacó que no tener un plan preventivo ante estos señalamientos de insolvencia pudiera provocar una nueva degradación de las deudas de la Isla. “Más degradaciones solo agudizaría la recesión económica que atravesamos. A esto le añadimos que con la Ley de quiebra criolla se pretende una reestructuración de las deudas de las corporaciones públicas, y por consiguiente, el inminente impago de los préstamos al BGF, lo cual implicaría un golpe devastador a la liquidez y sostenibilidad de esta agencia”.

En términos generales, el Informe de Global Credit Research de Moody’s Investors Service expone que elementos como el déficit en los recaudos del Departamento de Hacienda, así como la dificultad que presenta el gobierno para entrar en los mercados de inversión, en conjunto con la aprobación de la ley de quiebra criolla son los factores principales que provocarían una falta de liquidez en dicha entidad gubernamental y, en su consecuencia, un riesgo latente de una nueva degradación crediticia.

“Es deber inherente del Senado, de acuerdo a estas circunstancias particulares e históricas que vivimos, velar porque el aparato gubernamental tome las medidas necesarias para lograr que el crédito de Puerto Rico recupere las clasificaciones positivas que obtuvimos en el pasado cuatrienio. Este Cuerpo tiene que ejercer una estricta fiscalización del BGF, en lo concerniente a su liquidez y capacidad financiera, así como investigar e identificar todas las acciones necesarias que está llevando a cabo la agencia para evitar otra degradación del crédito de Puerto Rico. Esto no se puede postergar más”, terminó diciendo Seilhamer.