Obama declara “estado de emergencia” en Colorado

El mandatario estadounidense viajó este viernes a la zona afectada por los incendios, que han consumido al menos 300 viviendas, para evaluar la situación.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, declaró este viernes “estado de emergencia” en Colorado, donde los incontrolables incendios han consumido 300 viviendas y han provocado la evacuación de 32,000 personas.

Obama emitió ese pronunciamiento este jueves, tras confirmar su visita a Colorado este viernes, para inspeccionar los daños ocasionados por el incendio y estudiar la posibilidad de enviar mayores ayudas.

Las autoridades dicen que más de 300 casas han sido destruidas desde el martes, cuando el fuego comenzó a arder fuera de control en Waldo Canyon forzando a unas 36,000 personas a abandonar sus viviendas en Colorado Springs, la segunda ciudad más grande del estado.

Según Steve Bach, el alcalde de Colorado Springs, 346 residencias han sido destruidas.

“Todos nosotros vivimos en la misma calle sin salida que ha sido eliminada por el incendio forestal esta semana y estamos intercambiando ideas sobre si reconstruimos, problemas de cobertura del seguro, cuáles son nuestros planes, además somos amigos, somos amigos muy cercanos, nos queremos ayudar entre nosotros”, señaló Terry Rector, una de las víctimas de la conflagración.

Por su parte, la Casa Blanca explicó a través de un comunicado, Obama ordenó este viernes, previo a su visita a Colorado, el envío de recursos federales para combatir los incendios, principalmente en las áreas de de High Park y Waldo Canyon.

Sin embargo, agencias de noticias han anunciado que Obama buscará en Colorado apoyo de sus votantes, teniendo en cuenta que es uno de los estados más disputados por el candidato republicano, Mitt Romney.

La campaña de Romney busca ganar terreno en las áreas rurales de Colorado, donde según un sondeo realizado en mayo pasado por la NBC News/Marist, el 46% de los electores respalda a Obama y un 42% al candidato republicano.

Los incendios en Colorado que empezaron el 23 de junio por causas desconocidas, han dejado una persona muerta, dos desaparecidas y la destrucción de más de 1,500 hectáreas de vegetación.

Por su parte las autoridades ambientales aseguraron hace pocos días a la prensa, que sólo se ha logrado contener el 5% del incendio debido a las altas temperaturas y a los fuertes vientos.