La marina de guerra venezolana interceptó un barco de exploración petrolera operado por una firma de Estados Unidos, lo detuvo y lo condujo con cinco tripulantes estadounidenses hacia territorio de la isla de Margarita.
El buque Teknik Perdana, con bandera panameña, hacía prospección de crudo a nombre de la compañía de Texas Anadarko Petroleum por encargo de las autoridades de Guyana, cuyo gobierno calificó el incidente de “seria amenaza para la paz en la región”.
Según la cancillería venezolana, el barco navegaba por un espacio marítimo que corresponde a Venezuela. Sin embargo, Guyana sostiene que el buque se encontraba en sus aguas territoriales.
El hecho ocurrió frente a la zona del Essequibo, una vasta porción de tierra y mar que ambos países se disputan desde hace décadas.
Las autoridades venezolanas dijeron que el barco y sus tripulantes serán investigados acorde con el “Derecho Internacional Marítimo y en cumplimiento del resguardo de nuestra soberanía”.
Mediante un comunicado, la cancillería hizo llegar una “enérgica protesta” al gobierno guyanés por autorizar a “embarcaciones extranjeras” a entrar “en el mar territorial y zona económica exclusiva de Venezuela” sin la debida autorización.
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